Rosácea: Toxina botulínica como una opción terapeútica
La rosácea es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que provoca enrojecimiento facial y episodios de rubor. Estos síntomas pueden impactar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Aunque todavía no se entiende completamente su origen, se han identificado varios factores que contribuyen a su desarrollo, como señales neurovasculares anormales, disfunciones en el sistema inmunológico y desequilibrios en el microbioma de la piel. Esta complejidad hace que el tratamiento sea un desafío constante.
La toxina botulínica como una nueva opción de tratamiento:
La toxina botulínica se presenta como una opción prometedora para tratar el eritema y el rubor persistente en pacientes con rosácea. Al bloquear la liberación de acetilcolina y modular otros neuropéptidos, la toxina puede reducir la vasodilatación de los vasos sanguíneos y la inflamación en la piel. Los estudios han mostrado resultados alentadores, con mejoras en el enrojecimiento facial observadas entre una y dos semanas después de la inyección, y efectos que pueden durar de tres a seis meses.
Desafíos y consideraciones en el tratamiento:
A pesar de la eficacia de la toxina botulínica, es importante tener en cuenta que es un tratamiento coadyuvante. Además, la necesidad de repetir las inyecciones debido a la recurrencia de los síntomas, plantea cuestiones sobre la costo-efectividad a largo plazo de este enfoque. Además, aunque los efectos secundarios suelen ser leves y temporales, como enrojecimiento localizado o moretones, es crucial que los pacientes estén bien informados sobre lo que pueden esperar antes de someterse al tratamiento.
En el módulo de Toxina Botulínica Nivel Avanzado del Diplomado en Medicina Estética del CEEI, podrás especializarte en diversas indicaciones estéticas y terapéuticas de la toxina botulínica. En quienes sufren de rosácea, la capacidad de la toxina botulínica para influir en los mediadores inflamatorios y neurotransmisores relacionados con la vasodilatación puede ofrecer una mejora notable en la calidad de vida.
Bibliografía:
- Luque, A.(2021). Botulinum Toxin: An Effective Treatment for Flushing and Persistent Erythema in Rosacea. The Journal of clinical and aesthetic dermatology, 14(3), 42–45.
- Alsaati, A. A., Alsaadoun, D., Kinkar, L. I., Alkhamis, R. S., Ahmed, W. A., & Almathami, A. H. (2023). The Efficacy and Safety of Botulinum Toxin A for the Treatment of Rosacea: A Systematic Review. Cureus, 15(12), e51304